El avión a cohete conocido como SpaceShipTwo tiene asientos ajustables, una gran cantidad de ventanas, un espejo en la parte posterior y cámaras para documentar el viaje.

Virgin Galactic es la compañía aeroespacial privada que tiene como objetivo hacer realidad los vuelos comerciales en el espacio exterior.

El turismo espacial a gran escala es por ahora un poco más que un sueño, y quizás nunca llegue a concretarse. Sin embargo, para todos aquellos con suficiente capital como para pagarse un pasaje se trata de una alternativa real.

La empresa ha mostrado recientemente el elegante interior de la cabina de la SpaceShipTwo, la aeronave destinada a realizar recorridos suborbitales.

La nave todavía se encuentra en una fase de pruebas.

Comodidades

Entre las comodidades ofrecidas se encuentran amplias ventanas, 6 asientos ajustables que se adaptan a los cambios en la fuerza G de cada fase del viaje y luces de ambiente.

A todo esto hay que sumarle un gran espejo en la parte trasera de la cabina que permitirá que los pasajeros se vean a si mismos flotando en el espacio, y 16 cámaras que documentan lo ocurrido durante el viaje.

 

La nave y el viaje

La SpaceShipTwo es un avión a cohete que se remonta a grandes alturas impulsada por un avión Jet y luego es liberada. Tras una breve caída libre los motores impulsan a la SST a los márgenes del espacio exterior.

En ese momento los pasajeros pueden levantarse de sus asientos. La nave gira para que los turistas espaciales puedan ver el planeta a través de las ventanas ubicada en el techo.

Luego de unos minutos los pasajeros regresan a sus posiciones y la nave se prepara para ingresar en la atmósfera y posteriormente realizar un descenso como planeador.

Los pasajeros

Más de 600 pasajes han sido vendidos con anticipación, lo que supone algo así como 100 vuelos a 6 pasajeros por recorrido. El costo de las reservas fue de USD 250 mil, y es posible que aumente en el corto plazo antes de bajar un poco.

Lo habíamos considerado para cuando terminara la pandemia, pero ahora es probable que volvamos a San Clemente.